¿Qué hacer después de imprimir?

trabajaos con diferentes acabados: glasofonado, troquelado, etc.

El tratamiento que le damos a cada impresión una vez finalizada varía mucho dependiendo de las necesidades del cliente. Porque todos los productos impresos precisan de un trabajo posterior para convertirlo en el producto final. En Impresum trabajamos con diferentes técnicas como el troquelado para carpetas, plegado para dípticos, trípticos o desplegables, hendido, glasofonado o peliculado, etc.

Conoce todas las opciones que tenemos para tus trabajos.

¿Qué pasa si mi trabajo sale mal o distinto de lo que esperaba?

Es difícil, pero si después tu exhaustiva revisión final y de nuestra prueba de impresión interna aún encuentras algún error (de acabados o algún error imputable a Impresum), repetiremos tu trabajo sin coste alguno.

Cuando esto suceda, se tendrá que hacer desde el mismo original, de lo contrario se considerará un trabajo nuevo. Recuerda siempre que ninguna garantía puede cubrir errores ortográficos o de diseño.

Troquelado

Se utiliza para producir impresos que tengan distintas formas a las rectangulares (carpetas, por ejemplo).

troquelado






Plegado

«El plegado es una técnica utilizada para crear un conjunto de páginas individuales de menor tamaño que la hoja impresa. Hay varios métodos de plegado, los dos principales son: el plegado paralelo y el plegado en cruz.» extraído del Manual de Producción Gráfica. Recetas, Editoral Gustavo Gili.

En impresum, como plegado paralelo tenemos:

Dípticos (plegado normal), trípticos (envolvente o zig zag) y desplegables de 4 a 7 cuerpos (envolventes, zig zag y ventana -sólo para 4 cuerpos-).

El plegado en cruz equivale al plano y el zig-zag al acordeón.






Hendido

Para doblar las impresos en papeles de gramajes superiores a 170 grs, se han de marcar las hojas para facilitar el plegado.

Se hace una marca como se ve en la imagen, para conducir mejor el doblado de las hojas y no romperlas.
hendido

Glasofonado o plastificado

El glasofonado es una película plástica que se adhiere al papel mediante calor, es un acabado posterior a la impresión que puede ser mate, brillo, tacto seda (soft touch)... El plastificado mate tiene un tacto muy especial y es el más común actualmente, el plastificado brillo, ahora más en desuso, ennoblece muchas portadas y catálogos que tenemos en nuestras librerías, el mate tacto seda es ahora mismo uno de los más aplicados por su tacto aterciopelado. También se conoce este proceso como peliculado o plastificado. Lo usamos en ciertas portadas, postales, tarjetas o que lo requieran.

plastificado-brillo-mate
Plastificado brillo o mate en nuestra carpeta de muestras

 

 

 

 

 

 

 

Es un proceso habitual para proteger los impresos y hacerlos más perdurables. Además es muy utilizado cuando hay una gran masa de color en una cara y detrás tenemos un blanco, con el plastificado o glasofonado podemos evitar alguna sombra en ese blanco producida por la tinta del lado opuesto.

En impresum sólo plastificamos sobre papel couché o estucado y sobre la cara estucada de la cartulina gráfica, consideramos que otros papeles que tienen un tacto no satinado, como los offset y algunos reciclados, no son adecuados para ponerles una película plástica encima, es mucho más importante mantener ese tacto especial. ¿Para qué elegir un papel con un tacto poroso para luego eliminarlo con este acabado extra?

Recuerda que sobre el glasofonado no podrás escribir con un bolígrafo normal, tendrá que ser un permanente.

Si aún no lo tienes claro, puedes tocar y ver un plastificado en nuestra carpeta de muestras, no dudes en pedirla.

 

 

 

 

 

 

 

Grapado

El doblado y grapado se aplica preferentemente para revistas, folletos, programas de mano, incluso para un mini manual de instrucciones o un portfolio.

Hasta el momento es el tipo de encuadernación más ecológico que existe dentro de las imprentas profesionales y además es de las maneras más económicas de encuadernar.

 

Corte

El papel se corta para que tenga un tamaño adecuado a la máquina de impresión y para su posterior manipulado.

También se corta el producto una vez impreso y encuadernado, para obtener su tamaño final y cantos igualados.